Tan agradable de percibir, tan bueno de dar
Carmen era una mujer volcada en el cuidado del hogar y efectuaba una jornada intensiva para contar con de más horas en casa. De recién casada se deshacía en tareas por gustar a Pedro, a su altruismo se le sumaba su amor a él, y más tarde, el amor de madre cuando se quedó embarazada.