Le explico lo de la semejanza de las películas de Jennifer Lopez y de su propia vida con Álvaro, cuya paz queda interrumpida por sus ataques de gilipollez como pausa publicitaria. Me siento una mala amiga, pero hago un esfuerzo para serlo un poquito más.
Qué decir el aliento. La boca es un órgano estelar en el campo sexual. Son bastante conocidos los estragos que el mal aliento genera en la interacción social. Puesto que bien, en el campo sexual se multiplican. Un amante no puede desatender tan relevante detalle.
Mientras que hacía mi doctorado en sexualidad humana, tuve la fortuna de tener como maestro a Jack Morin, autor de múltiples textos, entre ellos La psique erótica. Y su ecuación erótica fue algo que llamó de forma profunda mi atención. La ecuación plantea que: atracción + obstáculos = excitación (y/o deseo).
La felicidad no es una cosa que sucede. No es el resultado de la buena suerte o el azar. No es una cosa que el dinero puede comprar o bien el poder de dirigir. No depende de eventos externos, sino, más bien, de de qué forma los interpretamos.
Y le cogió del brazo. El inglés se resistía, por temor a lo que le pudiera pasar. En ese momento intervino la primera hoffmistress del Reino, Madame Gabrielle, para solicitar explicaciones al sumiso. Este proseguía negando que se hubiese masturbado públicamente.
El hombre se puso entre sus piernas y Alexia sintió unas mordeduras horribles, un dolor increíble cuando los dientes de las pinzas se clavaron inmisericordes en los hinchados y purpuréos labios vaginales.
Me gusta la compañía de caballeros apasionados para compartir, con ellos, instantes íntimos de placer.
Los seres humanos pueden soñar grandes sueños y crear edificios, ciudades y civilizaciones. Lo físico prosigue a lo mental, en consecuencia, cada creación comienza en la psique en forma de pensamiento antes que se realice la realidad física.
Lo anterior ilustra que ellas están considerablemente más preocupadas, de lo que pensamos, en el tema de lo importante que es para ellas ser atractivas para nosotros. La inversión y los sacrificios que hacen, muchas veces están fuera de nuestra realidad.
Por ende, deja espacio en la relación. Cuando aceptas que esa persona sí desea marcharse, que se vaya. Es en ese momento cuando comienza el equilibrio. El hombre ya no se siente ahogado por esa energía excesiva. Y si te ha conocido y valora de qué manera eres, decidirá quedarse.
